Cochabamba, 13 septiembre 2007 (ABI) - "Quiero decirles con mucha dignidad, fuerza y valentía a las transnacionales que si siguen utilizando a dirigentes ya sean sindicales o cívicos para oponerse a los cambios y evitar cumplir sus compromisos, que tienen su tiempo limitado en el país", declaró la noche de este jueves el presidente Evo Morales.
La dura posición presidencial fue expresada durante la Sesión de Honor del Concejo Municipal por el 197 aniversario del grito libertario de Cochabamba, ocurrido el 14 de septiembre de 1810.
El Jefe de Estado hizo esa advertencia ante el "chantaje" de algunas transnacionales que presumiblemente mueven con dinero a algunos sectores para oponerse a los cambios y eludir sus compromisos.
Explicó que en el marco del proceso de la nacionalización de hidrocarburos todavía hay negociaciones que se están realizando, pero, hay chantajes de algunas transnacionales que con dinero mueven a algunos dirigentes y organizaciones cívicas para que se opongan a la concreción de los proyectos a favor del país.
El Mandatario boliviano, de manera enfática, dijo que como "Bolivia, por más que sea un país pobre, tiene la obligación de hacer respetar las normas y su dignidad", señaló.
Morales dijo que algunas autoridades le pidieron la concreción del gasoducto Carrasco-Cochabamba y aunque no estuvo muy de acuerdo, porque hubiera preferido que sea YPFB la compañía que tenga a su cargo el tendido del nuevo ducto, tiene la obligación de atender esa demanda.
Aclaró que sobre ese tema, las negociaciones están encaminadas y hay garantizados 89,9 millones de dólares de inversión para transportar 130 millones de pies cúbicos por día.
"A veces es difícil entendernos con las transnacionales que quieren invertir, pero si tuviéramos disponibles 89,9 millones de dólares, qué mejor que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) ingrese en la construcción de este gasoducto", insistió.
Palabra cumplida
El presidente Morales recordó que lo que prometieron durante la campaña electoral de fines del 2005, como Gobierno se está cumpliendo, es decir, por ejemplo, se nacionalizaron los hidrocarburos y se recuperaron las refinerías para el Estado.
En ese contexto, recordó que durante el Gobierno de Acción Democrática Nacionalista (ADN) se enajenaron las refinerías a cambio de un crédito de 35 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional (FMI) y con ese dinero se pagaron sueldos y el aguinaldo a los burócratas del Estado en 2001 durante la administración de Jorge Tuto Quiroga.
Dijo que la recuperación de las refinerías fue por decisión del pueblo boliviano que antes se movilizó para hacer aprobar la modificación a la ley de hidrocarburos de Gonzalo Sánchez de Lozada.
"No querían aprobar las modificaciones a esta ley y tuvimos que asumir medidas de presión. Recuerdo que eso me costó una satanización de Carlos Mesa (ex presidente) que en 25 minutos, 23 veces repitió el nombre de Evo Morales haciéndome aparecer como enemigo de Bolivia", expresó.
Agregó que la movilización de las organizaciones sociales posibilitó modificar la ley petrolera, luego la nacionalización y la recuperación de las refinerías sin que Bolivia se preste dinero de nadie.
Respecto a las refinerías, Morales Ayma mencionó que cuando estaban en manos de Petrobras la carga fresca el 2007 --antes que estén en manos del Estado-- refinaban 22.800 barriles por día, sin embargo, en dos meses de haber pasado a manos del país se refinan 25.400 barriles por día, es decir, una diferencia de 2.600 barriles.
Sobre la inversión realizada, explicó que hasta el 2006 se había invertido tan sólo 6.908.000 dólares para mantenimiento de la refinería Gualberto Villarroel.
Tomando en cuenta esa realidad, el Mandatario explicó que hay recursos totalmente garantizados que se va a invertir desde este año hasta el 2011 un total de 30.801.000 dólares para que esta refinería (Gualberto Villarroel) llegue a producir 42 mil barriles por día. Es dinero del Estado", expresó.
Nenhum comentário:
Postar um comentário